
Los implantes dentales son piezas similares a tornillos, generalmente de titanio (existen también de zirconio), destinados a reponer piezas dentales desde su raíz. Consta de dos partes: el implante, el cual se coloca dentro del hueso por medio de una cirugía y la parte externa, que es la que se puede ver en boca, que es la corona.
Entre las ventajas del implante dental se puede mencionar:
- Son piezas individuales, lo que facilita su higiene, a diferencia de un puente, que es una estructura de por lo menos 3 unidades.
- Al ser el implante una estructura individual, no se deben desgastar los dientes adyacentes para colocar un puente.
- Al estar colocados en el hueso, ayudan a preservar el mismo; en el caso del puente siempre va a haber pérdida ósea.
- Su tasa de éxito es del 95% al 97% según la literatura.*
Entre los cuidados de los implantes podemos mencionar:
- Seguir la indicaciones de su odontólogo posterior a la cirugía de colocación de implantes.
- No fumar.
- Una vez que se haya puesto la corona higienizarla de manera correcta utilizando el hilo dental.
- Asistir a las citas de control programadas por su odontólogo.
En resumen, el implante dental es la opción fija más recomendable y con la mejor tasa de éxito para la reposición de piezas dentales que se han perdido, ya que devuelve tanto la funcionalidad masticatoria como la estética.
*Se debe tomar en cuenta tanto condiciones del implante (material, longitud, grosor, etc) como del paciente (si son fumadores, si es un paciente sistémicamente comprometido, etc).
Dra. Daniela Núñez Brenes